lunes, 22 de septiembre de 2008

A manera de prologo...


Los seres humanos comunes, estamos totalmente engañados por una mega estructura de información, que se inicia desde la más tierna edad. En ella han intervenido la familia, los amigos, la escuela y por supuesto, de manera decisiva, los medios masivos de información.


Un formidable sistema, que se auto sustenta a través del interés por enajenar y mantener en la ignorancia a los seres humanos. Las ideas que forman el mundo y la vida, y que son “nuestra visión del mundo”, han sido concebidas de manera preestablecida por los dueños del dinero. Ideas, como la democracia, la libertad, la modernidad, la globalización, la iniciativa privada, el progreso y bienestar sustentado en el consumo, el culto a la tecnología y la superposición del dinero sobre la vida, la comunidad y la familia, que en muchos casos, son dañinas y perversas, que distorsionan los principios y valores perenes que la humanidad ha venido construyendo a lo largo de los diez mil años que tenemos de vivir en civilización.


Los Mercaderes han cambiado el sentido y la razón de la vida de muchas personas y pueblos en el mundo. El culto al dinero, al Becerro de Oro y al consumo, nos ha llevado a la descomposición social y la destrucción de la vida, incluida la del planeta mismo. Los Mercaderes se “han vuelto a meter al templo”, son dueños de nuestros sentimientos en lo profundo del corazón, y son los amos de nuestros pensamientos a través del control de nuestra mente. Nos dirigen y mercan nuestras ilusiones, aspiraciones y sueños.


Esta serie de artículos de prensa, son una reflexión sobre este mal, que nos obliga a usar de manera violenta la fuerza de voluntad y la conciencia, como látigo efectivo para sacar a los Mercaderes de nuestro templo. Entendiendo que el templo de Dios, es el cuerpo humano. Necesitamos liberar la conciencia y el Espíritu, para volver a ser dignos depositarios de nuestra divinidad y reencontrar el sentido sagrado de la vida.

Guillermo Marín
Otoño de 2008 Ciudad de Oaxaca.

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